Onicofagia o morderse las uñas

¿Qué es y sus principales consecuencias?

Morderse las uñas

¿En qué consiste?

El hábito de morderse las uñas, que también abarca la cutícula y los tejidos blandos, es común en niños y adultos jóvenes, y suele asociarse con la ansiedad. Esta práctica puede causar daño a los dientes debido a fracturas o desgaste en los incisivos.

¿Qué alteraciones genera la Onicofagia?

Físicamente, puede provocar daño en las uñas y los tejidos circundantes, aumentando el riesgo de infecciones en los dedos y la boca. Además, la continua manipulación de las uñas con los dientes puede causar deformidades permanentes en las uñas y alteraciones en la estructura de los dientes, como desgaste excesivo o fracturas.

A nivel psicológico, la onicofagia puede estar asociada con el estrés, la ansiedad y la baja autoestima, ya que a menudo se utiliza como una forma de aliviar la tensión emocional. En casos graves, puede interferir con las actividades diarias y las relaciones sociales, afectando negativamente la calidad de vida del individuo. Es importante abordar tanto los aspectos físicos como emocionales de la onicofagia para prevenir complicaciones a largo plazo y mejorar el bienestar general del individuo.

Principales Consecuencias

 

MALOCLUSIÓN DENTAL

La mordedura repetida de las uñas puede alterar la alineación de los dientes, causando una maloclusión que afecta la mordida y la estética dental.
 

FRACTURAS DENTALES

 La fuerza aplicada al morder las uñas puede causar fracturas en los dientes, especialmente en los bordes de los incisivos.

SENSIBILIDAD DENTAL

 El desgaste irregular causado por morder las uñas puede exponer la dentina, provocando sensibilidad dental al frío, calor o alimentos dulces.

DESGASTE DENTAL

 La acción repetida de morder las uñas puede llevar a un desgaste anormal de la superficie de los dientes, resultando en una apariencia desigual y un mayor riesgo de fracturas dentales.

GRIETAS EN EL ESMALTE DENTAL

 La presión constante al morder las uñas puede provocar grietas en el esmalte dental, aumentando la vulnerabilidad de los dientes a la caries y otras lesiones.

DESPLAZAMIENTO DE LOS DIENTES

 La fuerza aplicada durante la mordida de las uñas puede causar el desplazamiento gradual de los dientes, alterando su posición natural y la mordida.

DAÑO EN LAS ENCIAS

 La presión continua sobre los dientes y las encías al morder las uñas puede causar daño en los tejidos de soporte dental, lo que puede conducir a problemas de salud periodontal.

RIESGO DE CARIES DENTALES

El hábito de morder las uñas puede aumentar la acumulación de placa bacteriana en los dientes, aumentando el riesgo de desarrollar caries dentales y otras enfermedades bucales.
 

¿Cómo identificarla?

La onicofagia se puede identificar observando signos físicos como uñas deformadas o desgastadas, lesiones en los tejidos circundantes y piel mordida. A nivel psicológico, la ansiedad o el estrés pueden desencadenar este hábito. Reconocer estos signos puede ayudar a identificar la onicofagia y abordarla de manera efectiva.

 

Es importante:

Es importante estar en constante revisión de los posibles síntomas o pistas respecto a este mal habito. Si el problema persiste o se agrava, puede ser necesario consultar a un odontólogo u otro profesional de la salud para crear un plan de tratamiento adecuado.
 

Tratamiento

Desde la perspectiva de un odontólogo, el tratamiento de la onicofagia implica un enfoque multidisciplinario que aborde tanto los aspectos físicos como psicológicos del hábito de morderse las uñas. En primer lugar, se realiza una evaluación exhaustiva de la salud bucal del paciente para identificar cualquier daño dental o tejidos blandos causados por la onicofagia.

Luego, se trabaja en colaboración con otros profesionales de la salud, como psicólogos o terapeutas, para abordar las causas subyacentes del comportamiento y desarrollar estrategias para manejar la ansiedad o el estrés asociados. Además, se pueden aplicar técnicas de modificación del comportamiento y terapias específicas para ayudar al paciente a dejar de morderse las uñas.

El odontólogo también juega un papel importante en educar al paciente sobre los efectos negativos de la onicofagia en la salud bucal y motivarlo para mantener hábitos saludables. El seguimiento regular y el apoyo continuo son fundamentales para garantizar el éxito a largo plazo del tratamiento.

 

Consejos para evitar morderse las uñas

Los niños pueden morderse las uñas como una respuesta a la ansiedad o el estrés emocional. Este hábito puede proporcionarles una sensación de alivio temporal.

 
 

Consejo 1

Mantener las manos ocupadas con objetos antiestrés, como bolígrafos o juguetes de apretar, y practicar técnicas de relajación para reducir la ansiedad que lleva al hábito de morderse las uñas.

 

Consejo 2

Aplicar esmaltes de uñas con sabor amargo para desalentar la acción de morder las uñas, y buscar apoyo social o terapias conductuales para abordar las causas subyacentes del hábito.